Ubicación:
Miraflores, Lima, Perú
Año proyecto: 2016 - 2019
Área construida:
22 360 m2
Premio:
Mención Honrosa en la XIX Bienal de Arquitectura Peruana
Hotel
HolidayInn
Lima está ubicada en una franja de desierto costero, en latitud Sur, 12°. Su clima es subtropical árido influenciado por el mar frío, con ciertos rasgos muy especiales como la ausencia de lluvias, un cielo cubierto de neblinas durante gran parte del año, y a pesar de esto, una alta radiación solar.
Cada vez que hacemos un edificio somos conscientes de que éste es parte del lugar y conforma un trozo de ciudad y por ello partimos desde estas condiciones ambientales urbanas, buscando que permitan una intensa relación arquitectura/ciudad.
Esta esquina cóncava, por requerimientos estructurales y regulación urbana, se conformó por placas de concreto, que dada la importancia del vacío urbano que genera, no podía leerse como placas medianeras, sino que debía ser parte integral del conjunto arquitectónico.
Por otra parte, cada sector del lote tiene normativas diferentes en cuanto a la regulación de la altura, y además, la parte posterior del terreno colinda con la casa protegida patrimonialmente de González Prada, con la cual se estableció una relación compleja y cuidadosa.
Junto con estas premisas, debíamos solucionar el tema estructural del edificio buscando colocar la menor cantidad y dimensión de elementos al interior del mismo en búsqueda de mayor flexibilidad y libertad espacial. En ese momento pensamos que podíamos hacer una canasta como exo-estructura para solucionar el comportamiento estático y sísmico. Esta canasta de concreto constituiría una malla exterior que asumiría también un rol importante de protección solar de la piel detrás de ella.
Así, la solución final que sintetiza la estrategia del proyecto fue construirlo todo en concreto expuesto, aunando la solución urbana, la estructural y la expresión arquitectónica del edificio, teniendo sumo cuidado en el tratamiento del zócalo peatonal y del skyline urbano.