La toma de partido se ha determinado en función de conciliar los aspectos programáticos, constructivos, funcionales y estéticos, que permiten realizar un edificio que propicie el mejor aprovechamiento posible de las vistas, la iluminación y la ventilación, así como una adecuada distribución y resolución de los aspectos de seguridad.

 

Se plantea un solo volumen compacto que agrupe todos los usos propuestos para el Centro de Formación Deportiva. Este volumen responde hacia la vía con una plaza que tiene como fin brindar juegos educativos para los niños.

 

En un nivel superior respecto a la plaza antes mencionada, se ubica una plaza lateral, desde la cual se puede acceder al ingreso principal del edificio y a una plaza de juegos educativos más controlada.

 

Dado a que el terreno colinda con una vía existente con pendientes variables, resultó primordial estudiar adecuadamente los niveles de esta para poder crear plataformas y conexiones directas hacia el proyecto.